Un colegio judio en Toulouse (sur de Francia) fue el escenario de un ataque en el que murieron tiroteados tres niños y el padre de dos de ellos, judíos todos, el 19 de marzo, hecho que coincidió con la campaña electoral francesa.
El asesino llegó en moto y abrió fuego indiscriminadamente matando a un profesor de escuela y dos de sus hijos, así como a la hija del director. Posteriormente el homicida se refugió en una casa en la que finalmente sería abatido por las fuerzas de seguridad francesas.
El autor portaba munición del mismo calibre que la utilizada para matar a un militar el pasado 11 de marzo también en Toulouse, y otros dos en la vecina Montauban cuatro días más tarde; por lo cual la Fiscalía de París sospecha que hay una vinculación entre estos hechos.Al escenario del drama acudieron el ministro de Interior, Claude Guéant y el candidato socialista a las Presindenciales, Francois Hollande. Los centros de culto han aumentado las medidas de seguridad y los militares "han recibido consignas de prudencia", según Sarkozy.
El presidente del Consejo Representativo de las Instituciones Judías de Francia señaló que "el hecho de que se trate de niños judios ha jugado un papel en su elección". La tesis antisemita fué señalada también por Hollande. Y el acto fue calificado por el presidente de "tragedia nacional".
Un francés árabe de 23 años fue el asesino del que se presume una vinculación a Al Qaeda.
La ONGD Ecos do Sur apoya a todas las víctimas de violencia xenófoba y expresa sus condolencias a los familiares de los asesinados en tran dramático suceso.
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