Unos 150 inmigrantes entraron ayer en Melilla, superando la valla que separa la ciudad de Marruecos, en el salto más numeroso en meses, producido en el paso fronterizo de Beni Enzar y el Barrio Chino. Según las informaciones, intentaron saltar unas 200 personas, y las que lo lograron se dirigieron al Centro de Estancia Temporal de Inigrantes (CETI). Fueron todos varones de entre 17 y 30 años, y al menos seis de ellos tuvieron que acudir al Hospital Comarcal por sufrir esguinces, traumatismos y fracturas. Acudieron a la Jefatura Superior de Policía, donde se les abrió un expediente de expulsión.
Entre tanto, el juez pide a la Guardia Civil las grabaciones de la tragedia de Ceuta, mientras que la Izquierda Plural reclama la dimisión del titular de Interior, Jorge Fernández Díaz. Asimismo, los Gobiernos de Ceuta y Melilla preparan una cumbre excepcional.
Kiko Cabanillas.
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